De esta forma se confirmó lo dictaminado por el Tribunal Oral en lo penal de Linares contra Francisco Alejandro Jiménez Fuente, quien sólo podrá optar a beneficios intrapenitenciarios a los 20 años de cumplir su pena.
La Corte de Apelaciones de Talca rechazó el recurso de nulidad presentado por la defensa de Francisco Alejandro Jiménez Fuentes y ratificó la sentencia que lo condenó a la pena de presidio perpetuo, en calidad de autor del delito consumado de violación con homicidio y hurto, ilícito perpetrado en abril de 2018 en Linares.
En fallo unánime la Primera Sala del tribunal de alzada confirmó la resolución dictada por el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Linares.
“La sentencia ha dado razones suficientes para el establecimiento de cada uno de los presupuestos fácticos que tuvo por comprobado, los que al haber sido debidamente calificados no se advierte vicio alguno que amerite la invalidación de lo resuelto, motivo por el cual ha de concluirse que en la especie no concurre el vicio formal invocado por la defensa y, por consiguiente, el recurso que sobre el particular se ha planteado debe ser desestimado”, indica el fallo.
Por tanto, la justicia resolvió que: “se rechaza el recurso de nulidad interpuesto por el abogado Defensor Penal Público Carlos Oyarzún Selaive, en representación del sentenciado Francisco Alejandro Jiménez Fuentes, en contra de la sentencia definitiva pronunciada el 15 de julio de 2021 por el Tribunal Oral en lo Penal de Linares”.
Antecedentes
Los hechos ocurrieron la noche del 26 y la madrugada del 27 de abril de 2018, en un domicilio ubicado en el callejón Los Paltos, en el sector de Huapi Alto de la comuna de Linares. En el lugar se encontraba sola la víctima, Adriana Inés Rosales Barros, de 67 años de edad, donde llegó Jiménez Fuentes, quien era cliente habitual del local clandestino de alcoholes que mantenía la víctima.
En la oportunidad, el imputado golpeó, violó y dio muerte a la mujer, para posteriormente envolver el cuerpo de la mujer en un cobertor, la subió a una carretilla que estaba en el domicilio y la llevó hasta un canal de regadío, a unos 50 metros de la casa habitación, lanzándola a las aguas. Asimismo, sustrajo entre $150.000 a $180.000, que la víctima mantenía producto de su pensión, aportes de INDAP e ingresos de su negocio de venta de alcoholes, además de un teléfono celular.